El dirigente nacional del PRD, Jesús Ortega, dijo ayer que la elección de Quintana Roo entró en un proceso de descomposición política con la prisión formal de Gregorio Sánchez Martínez, en cuyo trasfondo está la pretensión de destruir las alianzas perredistas y que el gobernador de ese estado y otros impongan a sus candidatos y aliados.
Afirmó que la cancelación de los derechos políticos de Greg es “una canallada”, consecuencia de la oposición del secretario de Gobernación, Fernando Gómez Mont, a las alianzas electorales del PAN con otros partidos políticos, en especial el PRD.
“Es una canallada de la Procuraduría General de la República, que consignó el expediente de Gregorio Sánchez a un juez de Distrito de Toluca, el cual rechazó por infundado; sin embargo, en vez de apelar, el Ministerio Público Federal volvió a consignarlo a otro juez, que lo dio por aceptado”, dijo.
Ortega habló en conferencia de prensa en San Cristóbal de las Casas, Chiapas, y señaló que se analiza la defensa legal del abanderado perredista en Quintana Roo, “a quien se le aprehendió para sacarlo de la contienda e imponer al candidato oficial, lo cual el PRD no permitirá”.
Ortega se reunió con candidatos chiapanecos en el inicio de las campañas electorales rumbo a los comicios del 4 de julio próximo, cuando serán elegidos 24 diputados uninominales, 16 de representación proporcional y 118 alcaldes.
Y a pesar de que ayer por la mañana reiteró que Greg se mantendría como candidato, por la tarde adelantó que el secretariado nacional del PRD se reunirá hoy para evaluar la posibilidad de postular un nuevo abanderado a la gubernatura quintanarroense.
En el arranque de la contienda electoral, el candidato de la alianza Unidos por Chiapas a la presidencia de Tuxtla Gutiérrez, Seth Yassir Vázquez Hernández, destacó la participación ciudadana en el gobierno.
